Los piojos son los enemigos número uno tanto de niños como de adultos. Pero, ¿cómo hacemos para que esos animales no tomen nuestro pelo y cuero cabelludo como una casa? Es importante difundir la prevención, que es bastante sencilla.
Cómo prevenir el ataque de piojos
Primero, enseña al niño desde temprana edad a no compartir artículos como gorras, toallas, peines, pañoletas, etc. Diles que es de uso exclusivo de ellos. Con frecuencia a los chicos hay que revisarles la cabeza para determinar la presencia de piojos y liendres. Cuando son huevos o más pequeñas es muy complicado eliminarlas, pero no es imposible. Colócale en el pelo de los niños aceite esencial de árbol de té u otros tipos.
Ayudan a matar los piojos, liendres y huevos.
¿Qué hacer para combatirlos?
Ahora, si ya el niño tiene piojos, busca vinagre y lávale el pelo con abundante líquido. Envuelve la cabeza con plástico o un gorro y deja actuar por espacio de una hora. El vinagre matará los parásitos. Una vez que retires el gorro, enjuaga el cabello con algún aceite para quitar los bichos muertos y el olor a vinagre.
Cuando peines el cabello, cerciórate de desenredarlo en su totalidad. Para ello, usa un peine antipiojos porque sus cerdas finas y muy juntas, ayudan a quitar las liendres de cada hebra. Se debe revisar mechón por mechón para poder acabar por completo con esta plaga transmisora de enfermedades.
Cada día, una vez que chico llegue de la escuela o el parque, revisa la cabeza para descartar cualquier anormalidad. Los infantes suelen compartir todo sin considerar problemas. En caso de que dudes de las recomendaciones, es ideal consultar a un médico de confianza que recete un producto apropiado para la piel del niño. No es bueno dejar pasar este tipo de problemas porque puede empeorar.
Mantén la higiene capilar del niño para prevenir.