Es probable que se hable mucho sobre los piojos, pero que al momento de tener que detectar si se está ante una infección o no, la mayoría de personas no estén capacitadas para evaluarlo.
Lo primero que se debe hacer cuando se tiene la sospecha, consiste en examinar la cabeza en unas condiciones de luz óptimas. Esto se debe a que los piojos no vuelas ni saltan, sino que se arrastran muy rápido y son muy buenos para esconderse.
Como consecuencia se hace necesario separar el cabello muy bien e ir examinando cada parte con todo el cuidado que sea posible, particularmente en lo que respecta a la zona del cuello, detrás de las orejas y el cuero cabelludo.
Debido a la velocidad en que se mueven quizá no detecte los piojos la primera vez ya que se necesita de algo de experiencia y conocimientos. En cualquier caso si quiere asegurarse puede optar por usar un peine para piojos, ya que es cuatro veces más rápido y dos veces más efectivo que hacerlo con un examen visual.
No hay que olvidarse de los huevos de los piojos o liendres, ya que recién los ponen son transparentes y por ende hay que fijarse en ellos desde varios ángulos y condiciones de luz.